Uno de los lemas de campaña de López Obrador, era primero los pobres, pero ya en la práctica, primero fueron sus obras faraónicas que a nadie beneficia y que solo representa un gasto para el país. Que al fin de cuentas, todo mundo solo necesita solo 200 pesos y un par de zapatos. Todo lo demás, solo es vanidad. Vaya presidente, y lo peor es que la gente se lo cree y parece ser que no baja en las encuestas según sus otros datos